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The sweet girl? CON Poppy EN Entrada al gran salón A LAS 14:00h, 04 de octubre |
Decir que su humor no era el mejor era poco. Salía de clases y le habían ido francamente mal. No era que normalmente fueran bien... Pero aquella en particular había sido una auténtica mierda, pues el docente había decidido humillarle delante de toda la clase y recordarle que Historia de la Magia era una asignatura imprescindible y que si seguía con el ritmo de siempre, intercedería para que no le dejaran ser titular en el equipo de Quiditch... Todavía no le habían dicho que lo era, si algún profesor ponía alguna pega le dejarían fuera. ¡Para una maldita vez que tenía ganas de formar parte del equipo de verdad!
Tal vez por eso, caminó de forma descuidada y giró demasiado rápido en el pasillo. Lo notó cuando alguien se chocó contra él. Frunció el ceño y, aunque probablemente había sido culpa suya, estuvo a punto de gritar cualquier mierda para recordarle a quien fuera que había tenido la mala suerte de toparse con él que abriera sus ojos...
Pero vio ese pelo, era una chica recogiendo sus libros del suelo y tuvo una sensación ligeramente... Familiar. Había visto a esa chica antes... ¿Cierto?
Se agachó y la ayudó a recoger los libros, no se había disculpado pero el gesto de ayudarla, viniendo de él, ya era como la mayor disculpa del universo.
Al tenerla de frente, le vino de pronto la imagen. Pelirroja... Huflepuff... rostro amable... La había visto... no en directo, desde los recuerdos de su hermano.
—Eres... ¿Poppy?— Preguntó con cierta curiosidad, dándole el libro de, precisamente, historia de la magia. Entrecerró sus ojos con una inusitada curiosidad...´
La "famosa" Poppy... la chica que podía agradarle a la persona que creía estar por encima de todos... ¿Cómo sería?
—¿Te he hecho daño?—Cargó con los libros, parecía llevar demasiado.—¿Ibas al gran salón a comer? Puedo... Puedo llevártelos.—Bajó la mirada, ser amable era lo más antinatural que había hecho en su vida.
Bueno, en realidad ni si quiera estaba siendo amable, era lo mínimo después del porrazo que se había llevado la chica por su culpa pero... Bueno, era Lex.
Merci Prouvaire!
Timelady
Dornish Sun
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The sweet girl? CON Lex EN Gran Comedor A LAS 14:00H, 4 DE OCTUBRE |
Quizá debería haber dejado los libros en la Sala Común, o reservados en la biblioteca en lugar de ir tan cargada hasta el Gran Comedor. Pero la verdad es que había desayunado muy poco y no quería llegar tarde y perderse los primeros platos, que eran lo mejores o se lo parecían, sobre todo cuando tenía hambre.
Quizá por ir demasiado preocupada por hacer equilibrio con los libros es que no se dio cuenta de que alguien se acercaba o el alumno iba pensando en sus propias cosas, el caso es que chocó con alguien y sus libros cayeron al suelo, ni uno le quedó en la mano, pero se agachó tan rápido como pudo a recogerlos, musitando alguna que otra disculpa.
- ¡Oh, vaya! Gracias. -Dijo al chico, Slytherin, que se agachó para ayudarla a recoger.- Sé que no debería ir tan cargada de libros y encima pensando en mis cosas, pero ya sabes... -Su parloteo se calló cuando el chico le preguntó si era ella.- ¿Eh? Sí, soy yo. -Asintió alegre, bueno, dando por supuesto que no hubiera más Poppys en Hogwarts, pero no se había cruzado ninguna de momento, así que era posible que no. Pero aunque el chico le sonaba, no lo terminaba de reonocer.- ¿Nos conocemos? Seguro que sí, lo siento mucho, debería acordarme.
Cuando terminaron de recoger, el chico se quedó algunos libros en las manos.- ¿Qué, daño? No, no te preocupes no ha sido nada. Creo que los libros se han llevado la peor parte. -Bromeó un poco, quitándole importancia al asunto. Poppy esperaba que dejara sus libros encima del montón que llevaba ella, sin embargo se ofreció a llevárselos al Gran Comedor.- Pues sí, iba hacia allí. ¿De verdad me harías ese favor? ¡Gracias! -Con su alegría habitual, o un poco más por haber conocido a alguien tan amable dirigió los pasos hacia el Comedor, ya pudiendo oler la comida recién hecha.- Pero, en serio, ¿nos conocemos? Creo que eres mayor para ser compañero de Fergus, pero supongo que lo conoces por compartir casa. O quizá eres amigo de Tabitha... -No conseguía recordar de qué le conocía, porque algo le decía que tenía que saber quién era. Sobre todo porque habían compartido colegio durante años, estaba mal no saber el nombre de alguien, incluso cuando hay cientos de alumnos pululando por el castillo.
Quizá por ir demasiado preocupada por hacer equilibrio con los libros es que no se dio cuenta de que alguien se acercaba o el alumno iba pensando en sus propias cosas, el caso es que chocó con alguien y sus libros cayeron al suelo, ni uno le quedó en la mano, pero se agachó tan rápido como pudo a recogerlos, musitando alguna que otra disculpa.
- ¡Oh, vaya! Gracias. -Dijo al chico, Slytherin, que se agachó para ayudarla a recoger.- Sé que no debería ir tan cargada de libros y encima pensando en mis cosas, pero ya sabes... -Su parloteo se calló cuando el chico le preguntó si era ella.- ¿Eh? Sí, soy yo. -Asintió alegre, bueno, dando por supuesto que no hubiera más Poppys en Hogwarts, pero no se había cruzado ninguna de momento, así que era posible que no. Pero aunque el chico le sonaba, no lo terminaba de reonocer.- ¿Nos conocemos? Seguro que sí, lo siento mucho, debería acordarme.
Cuando terminaron de recoger, el chico se quedó algunos libros en las manos.- ¿Qué, daño? No, no te preocupes no ha sido nada. Creo que los libros se han llevado la peor parte. -Bromeó un poco, quitándole importancia al asunto. Poppy esperaba que dejara sus libros encima del montón que llevaba ella, sin embargo se ofreció a llevárselos al Gran Comedor.- Pues sí, iba hacia allí. ¿De verdad me harías ese favor? ¡Gracias! -Con su alegría habitual, o un poco más por haber conocido a alguien tan amable dirigió los pasos hacia el Comedor, ya pudiendo oler la comida recién hecha.- Pero, en serio, ¿nos conocemos? Creo que eres mayor para ser compañero de Fergus, pero supongo que lo conoces por compartir casa. O quizá eres amigo de Tabitha... -No conseguía recordar de qué le conocía, porque algo le decía que tenía que saber quién era. Sobre todo porque habían compartido colegio durante años, estaba mal no saber el nombre de alguien, incluso cuando hay cientos de alumnos pululando por el castillo.
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The sweet girl? CON Poppy EN Entrada al gran salón A LAS 14:00h, 04 de octubre |
Lex no cambió su expresión cuando la chica le confirmó ser Poppy... No supo qué pensar de ello, en realidad le invadió eso, una curiosidad que rara vez solía aparecerle por nadie. No por nada en particular solo porque... Era "esa" Poppy, al menos por el momento pues no la conocía...
Pero parecía risueña, mucho... Y descuidada, probablemente. Lo curioso era que ni si quiera se había inmutado al verle, seguía con ese rostro alegre a pesar del golpe que se había llevado, y no precisamente por culpa de ella, y de estar hablando con él...
No parecía haber miedo alguno, ni hostilidad, ni si quiera un poco de incomodidad o nerviosismo aunque solo fuera por hablar con un desconocido...
Seguía sonriendo, de forma... ¿Amable? ¿Y amistosa? Si... Parecía que si...
Incluso le agradecía por ayudarla con los libros. Si, eran demasiados libros... Los cargó sin decir mucho, solo acompañándola bastante sorprendido.
¿Este era el tipo de persona que le gustaba a Marcus? En realidad... Nunca se había parado a pensar qué tipo de persona podría agradar a su hermano... Hasta ahora pensaba que a Marcus solo le gustaba Marcus...
Caminar junto a una chica en la escuela ya era suficientemente raro, que ella estuviera animada hablándole, después de darle las gracias por hacerle un favor... ¿Consideraba aquello un favor? Eso si que era... Como un sueño. No porque lo anhelara sino porque... Habría pensado que solo podía pasar en sueños.
Y empezó a hablarle de gente que... ¿Y quienes eran?
—Ah... no, no... creo que no... No conozco a mucha gente.— Y en realidad dudaba haber coincidido con la chica antes, o tal vez si pero no le había prestado atención hasta que se enteró del asuntillo de Marcus.—Aunque... Creo que conoces a mi hermano, Marcus O'donnell, es de séptimo, Ravenclaw. Yo soy de sexto...—¿Era eso lo que se comentaba cuando hablabas con alguien?
Era... Muy raro hablar con alguien, con una chica además... Aunque... Parecía agradable... Y pequeña a su lado. Tal vez por eso empujó la puerta del Gran Salón cuando llegaron para dejarla pasar. No había sido un acto... amable o caballeroso, sencillamente... ¿No era muy pequeña y con bracillos muy delgados para abrir esas puertas? Incluso aunque no cargara con los libros...
Merci Prouvaire!
Timelady
Dornish Sun
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The sweet girl? CON Lex EN Gran Comedor A LAS 14:00H, 4 DE OCTUBRE |
Se extrañó un poco de que dijera que no conocía a mucha gente al haberle preguntado por Fergus o Tabitha, después de todo estaban en Slytherin, era más probable que les conociera a ellos que a ella, además de que debía estar en quinto o sexto seguro, ya tendría que conocer a media escuela. Claro que sabía que ella lo hacía porque solía estar intentando ayudar a todo el que pudiera sin importar su Casa, o igual era demasiado sociable.
Cuando le dijo que era el hermano de Marcus, habría chasqueado los dedos de no estar sujetando libros.- ¡Claro! Sabía que de algo tenía que conocerte. -Bueno, no personalmente, pero al menos le sonaba su cara y haberle visto- Eras... ¿Lex? -Había escuchado algún comentario, sobre todo después de los partidos de quidditch, aunque como no prestaba mucha atención al deporte se le había olvidado lo que decían.
El chico abrió la puerta con ella que le dedicó una gran sonrisa y un alegre- Gracias -de nuevo. Era extraño no haber hablado antes con él, después de todo parecía un chico agradable y amable. Sabía ella que los Slytherin lo eran a pesar de las apariencias y lo que se dijera de ellos.- Podemos dejar los libros aquí si quieres. -Propuso, al acercarse a la mesa de Hufflepuff, para no tener que hacerle cargar con ellos más rato.- ¿Te quieres sentar aquí? Puedo enseñarte la receta especial de Hufflepuff para el zumo de calabaza. -Propuso alegre, queriendo hacer algo para compensar su ayuda, porque a ella el tema de haberse chocado ya se le había casi olvidado. Prefería ver que la había ayudado a pesar de todo.
Cuando le dijo que era el hermano de Marcus, habría chasqueado los dedos de no estar sujetando libros.- ¡Claro! Sabía que de algo tenía que conocerte. -Bueno, no personalmente, pero al menos le sonaba su cara y haberle visto- Eras... ¿Lex? -Había escuchado algún comentario, sobre todo después de los partidos de quidditch, aunque como no prestaba mucha atención al deporte se le había olvidado lo que decían.
El chico abrió la puerta con ella que le dedicó una gran sonrisa y un alegre- Gracias -de nuevo. Era extraño no haber hablado antes con él, después de todo parecía un chico agradable y amable. Sabía ella que los Slytherin lo eran a pesar de las apariencias y lo que se dijera de ellos.- Podemos dejar los libros aquí si quieres. -Propuso, al acercarse a la mesa de Hufflepuff, para no tener que hacerle cargar con ellos más rato.- ¿Te quieres sentar aquí? Puedo enseñarte la receta especial de Hufflepuff para el zumo de calabaza. -Propuso alegre, queriendo hacer algo para compensar su ayuda, porque a ella el tema de haberse chocado ya se le había casi olvidado. Prefería ver que la había ayudado a pesar de todo.
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The sweet girl? CON Poppy EN Entrada al gran salón A LAS 14:00h, 04 de octubre |
¿En serio? ¿De algo tenía que conocerle? En realidad no sabía por qué... ¿Por qué tendría que conocerle? Bueno, jugaba al Quidditch, a muchos les gustaba el deporte y conocían a los miembros de los equipos... Y no era por prejuzgar, pero la huflepuff no parecía del tipo de chica a la que le gustara el deporte...
Y no porque la conociera o eso pudiera verse, básicamente porque si le llamaba la atención a su hermano debía ser del tipo... Estudiosa y todo eso. Y por el montón de libros que llevaba no debía estar tan equivocado.
—Vaya, si, Lex...—Eso si le sorprendió. ¿Le había hablado Marcus de él alguna vez? No había ninguna justificación o tema de conversación que se le ocurriera como para que su hermano hablara de él...
O tal vez por el quidditch. Bueno, eso si que fue una sorpresa en cualquier caso.
Al entrar dejó los libros donde la chica le dijo. La verdad es que era un milagro que no se le hubieran caído antes y que pudiera llevarlos con esos bracitos. ¿Era la segunda vez que pensaba eso?
Si, y no le gustaba esa sensación.
La chica se mantenía risueña e incluso le había invitado a sentarse a comer... En la mesa de los tejones. Eso fue extraño. Lex nunca había comido fuera de su mesa, del extremo de su mesa... Y nunca con nadie más que no fuera su hermano pero...
Aquella chica... No podía evitar sentir más curiosidad conforme pasaba minutos con ella.
—Zumo de calabaza...— No... ¿Por eso Marcus le había servido zumo de calabaza? Presionó sus labios para guardarse una sonrisa y asintió, sentándose frente a la chica.—Si... suena... suena bien.—Confesó, algo divertido.
—Mm... Todos esos libros... ¿Son de cosas que estudias?—En realidad parecía una pregunta estúpida, era obvio que la chica no iba a dedicarse a pasear unos libros de un lado del castillo a otro solo por placer, pero en realidad eran muchos y le parecía algo... sorprendente, y eso que estaba acostumbrado a ver a su hermano sin parar de estudiar.—Quiero decir... Parece... Mucho.
Merci Prouvaire!
Timelady
Dornish Sun
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The sweet girl? CON Lex EN Gran Comedor A LAS 14:00H, 4 DE OCTUBRE |
- ¡Estupendo! -Exclamó cuando aceptó quedarse y sentarse en la mesa de Hufflepuff para compartir zumo de calabaza y la comida.- Verás... -Empezó a contarle, como si fuera un secreto importante y no algo que conociera medio Colegio.- La receta especial de Hufflepuff consiste en echarle un poco de canela por encima. Así está mucho más bueno. -No creía que se hubiera quedado solo por la oferta de la receta especial, pero ella la había ofrecido y tenía que cumplir con el pacto, claro.
Inclinó la cabeza mientras esperaba a que apareciera la comida sobre la mesa, prestando atención a su pregunta sobre los libros y dibujando una sonrisa alegre al descubrir la confusión que se había creado.
- ¿Eh? Ah, sí. Es mucho, ¿verdad? -Se rió un poco por lo bajo.- Pero no es todo para mí o para estudiar. -Le contó, aunque tenía la impresión de que igual estaba haciendo más lío con su forma de contarlo.- La mayoría son libros para consultar algunas cosas. Sobre todo de cursos pasados que ya no recuerdo mucho. -Se colocó un mechón rebelde detrás de la oreja al decirlo.- Los uso sobre todo para las tutorias con alumnos de otros cursos. Ya sabes, algunos necesitan una ayuda extra y los profesores y prefectos no pueden estar por todos... -Igual estaba explicando mucho, ¿no?- En fin, eso, es que soy una de las tutoras de Hufflepuff. -Terminó concluyendo.
Justo a tiempo porque las bandejas mostraron los primeros platos y Poppy no dudó en servirse un poco de pollo asado y una buena cantidad de patatas al horno con guisantes.- ¡Mis favoritas! ¿Quieres que te ponga? -Ofreció a Lex con el cucharón en la mano.
Inclinó la cabeza mientras esperaba a que apareciera la comida sobre la mesa, prestando atención a su pregunta sobre los libros y dibujando una sonrisa alegre al descubrir la confusión que se había creado.
- ¿Eh? Ah, sí. Es mucho, ¿verdad? -Se rió un poco por lo bajo.- Pero no es todo para mí o para estudiar. -Le contó, aunque tenía la impresión de que igual estaba haciendo más lío con su forma de contarlo.- La mayoría son libros para consultar algunas cosas. Sobre todo de cursos pasados que ya no recuerdo mucho. -Se colocó un mechón rebelde detrás de la oreja al decirlo.- Los uso sobre todo para las tutorias con alumnos de otros cursos. Ya sabes, algunos necesitan una ayuda extra y los profesores y prefectos no pueden estar por todos... -Igual estaba explicando mucho, ¿no?- En fin, eso, es que soy una de las tutoras de Hufflepuff. -Terminó concluyendo.
Justo a tiempo porque las bandejas mostraron los primeros platos y Poppy no dudó en servirse un poco de pollo asado y una buena cantidad de patatas al horno con guisantes.- ¡Mis favoritas! ¿Quieres que te ponga? -Ofreció a Lex con el cucharón en la mano.
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The sweet girl? CON Poppy EN Entrada al gran salón A LAS 14:00h, 04 de octubre |
Bueno... Había algo que hacía que no fuera exactamente incómodo el estar con aquella chica, ella hablaba y parecía seguir del mismo humor todo el tiempo, aunque él no dijera nada.
De hecho, estaba siendo sumamente amable y... casi encantadora.
¿Esto era a lo que se refería Marcus con ser simpático? Tal vez.. aunque al menos molesta.
Le explicó, tal como había prometido, en qué consistía el secreto del zumo de calabaza. Lo cierto era que para Lex si que era un secreto pues no compartía mucha información con otros estudiantes...
Y si, debía ser por eso que su hermano le había ofrecido zumo de calabaza... No era tan genio como creía, o al menos no tan original...
Escuchó cómo le explicaba acerca de los libros y pensar que no eran para ella era todavía más curioso. Lo hacía para consultar cosas de otros años y ayudar a otros estudiante. Lex ignoraba que hubiera alumnos de clases superiores que hicieran eso...
Era decir, si había una amistad si pero no como algo... Que soliera hacer...
Se quedó pensando en ello mientras la chica le ofrecía patatas al horno... Era posible que desde que tenía siete años nadie le hubiera servido la comida...
Pero le pareció incluso divertido así que solo asintió acercándole el plato.
—Y... esas tutorías... ¿Solo las haces para los de tu casa?—Y ni si quiera sabía por qué había preguntado eso. En realidad si pero...
¿Por qué quería saber más de la chica? Había sentido curiosidad por lo de Marcus y lejos de despejarla, parecía que se acrecentaba...
—Porque he visto un libro de historia de la magia y...—Aunque estuviera pensando en algo en concreto decir que necesitaba ayuda eran palabras mayores para el Slytherin.—...bueno, digamos que no la estoy llevando muy allá.—Comentó, acercando su plato cuando la chica ya lo hubo llenado casi entero de patatas al horno con guisantes. La miró con la ceja alzada, ¿No era aquella demasiada ración?
En parte era divertido también...
Merci Prouvaire!
Timelady
Dornish Sun
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The sweet girl? CON Lex EN Gran Comedor A LAS 14:00H, 4 DE OCTUBRE |
Cogió el plato de Lex con una sonrisa de lo más alegre y se puso a servirle, pero como él le preguntó aquello dejó de mirar las cantidades mientras hablaban.- No, en realidad los tutores podemos dar clase a quien las necesite, siempre que tengamos tiempo. -Explicó encogiéndose de hombros.- Aunque es verdad que la mayoría prefiere acudir a los de sus propias Casas, supongo que porque les ven más a menudo y esas cosas, pero yo suelo tener de todas. -No es que Poppy le diera mucha importancia a eso, pero era evidente que era bastante más agradable que otros tutores que solo buscaban el reconocimiento del puesto y sobresalir un poco por encima de los demás.
- ¿Historia de la Magia? -Miró en los libros como si pudiera diferenciar cuál era desde ese ángulo, claro que no podía.- ¿Y quieres que yo te ayude? ¿De verdad? -Preguntó, pero entonces se dio cuenta de que igual le había servido demasiadas patatas.- Ups, igual me he pasado y no te gustan tanto como a mi. -Murmuró mientras le miraba, aunque no parecía... bueno, parecía hasta divertido.- Lo siento, ¿quieres que te quite un poco? -Podía echarse en su plato todo lo que él no quisiera, después de todo a ella le encantaban y podría comerse una fuente entera casi sin darse cuenta.
Dejó que decidiera lo que hacer antes de seguir hablando.- Bueno... Historia de la Magia. Si quieres puedo echarte una mano con eso, siempre que no me digas que te resulta aburrida, porque en el fondo tiene muchas osas interesantes y divertidas que recordar. No todo son fechas y... -De pronto se dio cuenta de algo en lo que no había pensado.- ¿Y a tu hermano no le enfadará que no le pidas ayuda a él primero? ¿O ya lo has hecho? Supongo que sí y que está muy ocupado siendo prefecto. -Se respondió a sí misma antes de comer un poco.
- ¿Historia de la Magia? -Miró en los libros como si pudiera diferenciar cuál era desde ese ángulo, claro que no podía.- ¿Y quieres que yo te ayude? ¿De verdad? -Preguntó, pero entonces se dio cuenta de que igual le había servido demasiadas patatas.- Ups, igual me he pasado y no te gustan tanto como a mi. -Murmuró mientras le miraba, aunque no parecía... bueno, parecía hasta divertido.- Lo siento, ¿quieres que te quite un poco? -Podía echarse en su plato todo lo que él no quisiera, después de todo a ella le encantaban y podría comerse una fuente entera casi sin darse cuenta.
Dejó que decidiera lo que hacer antes de seguir hablando.- Bueno... Historia de la Magia. Si quieres puedo echarte una mano con eso, siempre que no me digas que te resulta aburrida, porque en el fondo tiene muchas osas interesantes y divertidas que recordar. No todo son fechas y... -De pronto se dio cuenta de algo en lo que no había pensado.- ¿Y a tu hermano no le enfadará que no le pidas ayuda a él primero? ¿O ya lo has hecho? Supongo que sí y que está muy ocupado siendo prefecto. -Se respondió a sí misma antes de comer un poco.
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The sweet girl? CON Poppy EN Entrada al gran salón A LAS 14:00h, 04 de octubre |
Ni si quiera sabía bien lo que estaba haciendo. Era cierto que debía mejorar sus calificaciones, no le obsesionaban los resultados pero exigían unos mínimos para poder seguir en el equipo. La idea de pedir ayuda a alguien más le daba hasta nauseas, y lo cierto era que probablemente no la necesitara, solo con dignarse a abrir el libro y leer... Era suficiente.
Pero no había caído en que alguien que no fuera de su entorno pudiera echarle una mano, y por supuesto que fuera justamente ella tenía algo que ver...
No quería fastidiar a Marcus—o no del todo—pero si sentía cierta curiosidad que todavía no había aplacado.
Y debía reconocer que le resultó divertida la forma en la que la chica se disculpó por haberle llenado el plato de patatas...
Como si hubiera cometido un crímen.
Lex solo negó con la cabeza y tomó el plato, estaba bien, tenía entrenamientos y comer hidratos de carbono siempre venía bien para rendir...
Así que lo puso frente a él y tomó el cubierto, mirándola pues seguía hablando.
Al parecer no podría decir que historia de la magia era aburrido... Bueno, no sería difícil recordar. Para él todo era aburrido pero tampoco era algo que tuviera que compartir con la chica, después de todo parecía muy entusiasmada, no con la idea de ayudarle sino simplemente con la asignatura.
Y entonces dijo algo en lo que no había caído hasta ese momento pero que le hizo dar una media sonrisa... que si su hermano no se enfadaría...
—Oh... si, algo así...—Respondió, aunque pareció más bien que se refería a eso que había añadido ella de que le había pedido ayuda y estaba ocupado, pero no... Más bien era por lo otro, seguro que se indignaba...
Y tampoco era que quisiera joderle, pero se notaba que no le había ayudado nunca y era su hermano, se ponía tan pedante cuando se ponía con la tarea que habría preferido comerse el plato, literal.
—Pues... Me iría bien... Mi calificación no es la mejor y... Me juego que me echen del equipo.—Añadió y empezó a comer.
Vaya, no sabía si las había probado antes pero...
—Están buenas.—Añadió de las patatas. Comió unas cuantas más antes de seguir hablando.—Y... ¿Eres muy amiga de mi hermano?
Merci Prouvaire!
Timelady
Dornish Sun
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The sweet girl? CON Lex EN Gran Comedor A LAS 14:00H, 4 DE OCTUBRE |
Se sintió un poco aliviada cuando él no se enfadó porque se pasara con la ración de patatas y cogiera el plato para comer. Igual le gustaban tanto como a ella y no le había dado tiempo a decirlo. Seguro que era eso.
Empezó a comer, pinchando entre las patatas y el pollo, asintiendo despacio cuando aclaró que Marcus no podía ayudarle porque estaba muy ocupado. Es que era normal, los prefectos tenían mucho trabajo con la organización, vigilancias y demás. Por no hablar de que el Ravenclaw casi siempre estaba estudiando algo interesante o investigando por su cuenta. Era increíble que tuviera tiempo para todo.
- El equipo de Quidditch, ¿verdad? -Se asintió a sí misma, porque era lo único que tenía sentido.- Entonces, podríamos programar alguna hora semanal para que repases conmigo. Estoy segura de que todo va a ir bien. Solo tenemos que ver tus horarios y los míos y buscar un huequecito...
Miraba hacia el techo mientras comía, tratando de recordar las horas que tenía libres o si había alguna que podía cambiar con otros chicos para así hacerse un poco idea de qué días podían ser esos encuentros para estudiar Historia de la Magia.
Sonrió mucho cuando dijo que las patatas estaban buenas.- Me alegro de que te gusten, así no me siento tan mal por haberte puesto tanto. -Bromeó un poquito. La pregunta sobre su hermano la hizo asentir.- Sí, claro. -Ella era muy amiga de casi todo el mundo, igual que Marcus, así que eran amigos entre ellos. Por no hablar de que Marcus era siempre muy amable y divertido. Era difícil no quererle.- Coincidimos en clases desde primero, así que es difícil que no nos conozcamos. Además, es muy simpático y siempre tiene algún hechizo nuevo que enseñarme o algo que contar. Y también me escucha cuando yo me pongo a parlotear de cosas que no todo el mundo encuentra tan interesantes. -Como cuando hablaba del mundo muggle, a casi nadie en Hogwarts le interesaba, pero él la había animado a hablar e incluso había propuesto que le enseñara un poco de esas cosas, como una película.- Aunque bueno, eso también lo estás haciendo tú. No te estoy dejando hablar mucho, me parece. -Era una pequeña disculpa velada, porque a ratos no se daba cuenta de que hablaba demasiado, igual a él no le apetecía escucharla tanto mientras comían.
Empezó a comer, pinchando entre las patatas y el pollo, asintiendo despacio cuando aclaró que Marcus no podía ayudarle porque estaba muy ocupado. Es que era normal, los prefectos tenían mucho trabajo con la organización, vigilancias y demás. Por no hablar de que el Ravenclaw casi siempre estaba estudiando algo interesante o investigando por su cuenta. Era increíble que tuviera tiempo para todo.
- El equipo de Quidditch, ¿verdad? -Se asintió a sí misma, porque era lo único que tenía sentido.- Entonces, podríamos programar alguna hora semanal para que repases conmigo. Estoy segura de que todo va a ir bien. Solo tenemos que ver tus horarios y los míos y buscar un huequecito...
Miraba hacia el techo mientras comía, tratando de recordar las horas que tenía libres o si había alguna que podía cambiar con otros chicos para así hacerse un poco idea de qué días podían ser esos encuentros para estudiar Historia de la Magia.
Sonrió mucho cuando dijo que las patatas estaban buenas.- Me alegro de que te gusten, así no me siento tan mal por haberte puesto tanto. -Bromeó un poquito. La pregunta sobre su hermano la hizo asentir.- Sí, claro. -Ella era muy amiga de casi todo el mundo, igual que Marcus, así que eran amigos entre ellos. Por no hablar de que Marcus era siempre muy amable y divertido. Era difícil no quererle.- Coincidimos en clases desde primero, así que es difícil que no nos conozcamos. Además, es muy simpático y siempre tiene algún hechizo nuevo que enseñarme o algo que contar. Y también me escucha cuando yo me pongo a parlotear de cosas que no todo el mundo encuentra tan interesantes. -Como cuando hablaba del mundo muggle, a casi nadie en Hogwarts le interesaba, pero él la había animado a hablar e incluso había propuesto que le enseñara un poco de esas cosas, como una película.- Aunque bueno, eso también lo estás haciendo tú. No te estoy dejando hablar mucho, me parece. -Era una pequeña disculpa velada, porque a ratos no se daba cuenta de que hablaba demasiado, igual a él no le apetecía escucharla tanto mientras comían.
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Asintió, ignoraba si había otro equipo, aunque tal vez en algún club se hablara así y también tuvieran corte de notas, no sabía eso, tampoco lo había mirado. Y en realidad, era extraño que alguien estuviera siendo tan amable con él, pensando de esa forma, y no parecía como muy obligada a ello, a buscar una hora donde pudieran coincidir. Eso fue todo un detalle, al menos eso le pareció.
—Seguro estás más ocupada que yo... Cuando te vaya bien yo me adapto.—Comentó, y no era por ser amable, se trataba de una realidad. Fuera de las clases, y ella tendría esas horas ocupadas también, y el Quidditch no tenía nada más...
Y hasta más avanzado el curso no se ponían muy pesados con eso.
Siguió comiendo mientras la observaba, como respuesta a su alusión al plato. Bueno, estaba en edad de crecimiento, seguro que comer le vendría bien.
Después de eso, empezó la parte... interesante, la chica hablando de Marcus.
Vaya... Estaba hablando muy bien de su hermano. Le encantaría saber que le parecía un chico simpático, le costó tanto no rodas sus ojos al mencionar eso... Con lo que le gustaba a Marcus no dejar de decirle que era un chico simpático.
No sabía si lo estaba diciendo con una emoción especial o la chica siempre hablaba así, aunque estaba diciendo cosas interesantes, se decantaba más por la segunda.
—Oh... No soy muy hablador así que... está bien que hables.—Le aseguró, y de todas formas él le había preguntado. Y bueno...
Tampoco era tan distinta a su hermano, aunque era infinitamente más bonita y menos irritante.
No tenía mal gusto... o al menos eso supuso.
Demasiado para ti, Marcus.
—Tenía razón en que eres muy agradable y atenta, es todo un detalle que me ayudes cuando ni si quiera me conoces...
Merci Prouvaire!
Timelady
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Le dedicó una sonrisa al Slytherin cuando dejó que ella decidiera el momento que mejor le conviniera según sus horarios, era todo un detalle.- Vaya, eres muy amable, Lex. -Sonrió y pensó un poquito más, igual debería llevar un horario consigo a todas partes. Puede que lo hiciera en alguno de los bolsillos de su túnica y no lo recordara.- ¿Te parece bien los sábados por la tarde? Sobre las cuatro. Son días que tengo más libres y creo que los equipos entrenan por las mañanas así que no te afectaría mucho tampoco. -Ella hacía los deberes aprovechando que muchos iban a verles esos días, o que había partido, no estaba segura, no se acercaba al campo en general.
Se estaba sintiendo un poquito mal por estar hablando sin parar y darle unas cuantas vueltas a algo que seguramente él respondería con un par de palabras. Bueno, no él por ser él, porque tampoco le conocía tanto, pero la gente solía hacerlo y era también muy propio de los Slytherin, incluso Fergus y Tabitha eran mucho menos expresivos que ella. Pero también la dejaban hablar y entusiasmarse tranquilamente, así que no era algo malo, por mucho que a ella le gustaría que hablasen más.
- ¿Tenía razón? -Preguntó levantando la cabeza de su plato.- ¿Marcus te ha hablado de mí? -Puso una sonrisa emocionada al pensar que podría haberla mencionado y decir esas cosas de ella.- Vaya, es todo un cumplido que lo haya dicho y que tú también lo pienses. Es muy bonito cuando dicen esas cosas de una. -De verdad que era bonito pensar que la gente la veía así, cuando ni siquiera se esforzaba por ser de esa manera.- Simplemente es que creo que todos tenemos que ayudarnos los unos a los otros para así poder mejorar. Si solo pensamos en nosotros mismos no llegaremos a ningún sitio, porque en algún momento todos necesitamos ayuda y no pasa nada por pedirla. -Asintió para sí misma a sus propias palabras.- Hogwarts es un gran lugar para que podamos aprender eso. -Claro que también había muchos prejuicios por la división en Casas y las ideologías de algunas familias de magos, pero el objetivo era que pudieran dejar eso aparte y trabajar en común. O así lo veía ella.- Y si vamos a estudiar juntos, seguro que terminaré conociéndote mejor. Claro que si crees que hay algo que deba saber, me lo puedes decir... no sé, ¿eres alérgico a algo? Porque a veces me gusta llevar galletas a las tutorías... -Y ya había cambiado el tema sin querer.
Se estaba sintiendo un poquito mal por estar hablando sin parar y darle unas cuantas vueltas a algo que seguramente él respondería con un par de palabras. Bueno, no él por ser él, porque tampoco le conocía tanto, pero la gente solía hacerlo y era también muy propio de los Slytherin, incluso Fergus y Tabitha eran mucho menos expresivos que ella. Pero también la dejaban hablar y entusiasmarse tranquilamente, así que no era algo malo, por mucho que a ella le gustaría que hablasen más.
- ¿Tenía razón? -Preguntó levantando la cabeza de su plato.- ¿Marcus te ha hablado de mí? -Puso una sonrisa emocionada al pensar que podría haberla mencionado y decir esas cosas de ella.- Vaya, es todo un cumplido que lo haya dicho y que tú también lo pienses. Es muy bonito cuando dicen esas cosas de una. -De verdad que era bonito pensar que la gente la veía así, cuando ni siquiera se esforzaba por ser de esa manera.- Simplemente es que creo que todos tenemos que ayudarnos los unos a los otros para así poder mejorar. Si solo pensamos en nosotros mismos no llegaremos a ningún sitio, porque en algún momento todos necesitamos ayuda y no pasa nada por pedirla. -Asintió para sí misma a sus propias palabras.- Hogwarts es un gran lugar para que podamos aprender eso. -Claro que también había muchos prejuicios por la división en Casas y las ideologías de algunas familias de magos, pero el objetivo era que pudieran dejar eso aparte y trabajar en común. O así lo veía ella.- Y si vamos a estudiar juntos, seguro que terminaré conociéndote mejor. Claro que si crees que hay algo que deba saber, me lo puedes decir... no sé, ¿eres alérgico a algo? Porque a veces me gusta llevar galletas a las tutorías... -Y ya había cambiado el tema sin querer.
Merci Prouvaire!
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The sweet girl? CON Poppy EN Entrada al gran salón A LAS 14:00h, 04 de octubre |
El chico solo asintió. Era un poco extraño pensar en dedicar el sábado por la tarde a estudiar pero... en realidad se le habría hecho extraño cualquier otro día porque no lo hacía nunca, o rara vez...
Y como su vida social era inexistente, no tenía ningún plan mejor. Lo raro era que una chica como ella quisiera pasar así su fin de semana... O lo habría sido de no ser Marcus su hermano, el chico cuyo planazo era tirarse todo el día entre libros.
Lo que si era una sorpresa fue que pensara que era amable... Le estaba haciendo un favor así que... ¿Qué menos? No creía que fuera una cuestión de amabilidad...
Por un momento pensó que la había cagado al mencionar que su hermano tenía razón en cuanto a la descripción de ella, sobretodo al preguntar de ese modo si había hablado de ella y...
Que le gustara joderle de vez en cuando no quería decir que quisiera meterle en aprietos, y los sentimentales eran jodidos, eso podía saberlo hasta él por muy inútil social que fuera...
Así que le alivió ver a la chica casi entusiasmada por eso, o... ¿Ilusionada? No sabía si eso era demasiado, pero que no le desagradaba estaba claro.
Casi sonrió un poco escuchándola, no podía confirmar nada porque nadie había hablado de él bien antes, pero intuía que si sabías que alguien a quien aprecias habla bien de ti, debía ser bueno. ¿Poppy apreciaba a su hermano? Porque bien pensado...
Si estaba siendo tan amable con el Slytherin, al que acababa de conocer, debía ser muy difícil saber si trataba así a todo el mundo.
—Uhm... Es una perspectiva interesante...— Aunque él era inútil en pedir ayuda, no ayudaba a nadie, obvio porque ni si quiera le hablaban, tampoco era que se negara... Y aunque era el discurso que muchas veces solía tener su hermano...
En boca de la chica sonaba mejor.
—No, no... Ninguna alergia. Solo... No se me da muy bien el contacto con gente, como ya habrás comprobado...—Comentó con una ligera sonrisa, aunque estaba siendo... Bastante sencillo. De alguna manera aunque no dejara de hablar era cómodo.—Galletas... y estudio, voy a sentirme culpable por no ofrecer algo a cambio...—Aunque no se imaginaba qué podría servir a la chica.
—Puedo llevarte los libros cuando te haga falta... ¿Cómo ves?
Merci Prouvaire!
Timelady
Dornish Sun
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The sweet girl? CON Lex EN Gran Comedor A LAS 14:00H, 4 DE OCTUBRE |
De acuerdo, pues el sábado por la tarde se reuniría con Lex para poder ayudarle a estudiar Historia de la Magia, seguro que encontraba algo que lo hiciera un poco más interesante que las clases, porque la verdad es que el profesor no solía conseguir toda la atención de los alumnos y terminaba haciéndoles dormir.
Le agradó que no negara, como algunos habían hecho, que el espíritu de Hogwarts era compartir sabiduría y crear vínculos de amistad entre todos los miembros de la comunidad mágica, independientemente de su origen o cualidades. Era uno de los objetivos principales del Colegio desde sus inicios, cuando Helga Hufflepuff velaba por la integración y la harmonía entre todos los alumnos a los que acogían.
Anotó mentalmente que Lex no tenía ninguna alergia, era un buen dato. Aunque se rió un poco cuando dijo lo del contacto con la gente.- Pues a mi no me parece que se te de tan mal. Quizá dependa del tipo de persona con la que hables o sea cuestión de entrenamiento, por así decirlo. -Aunque no creía que todas las personas tuvieran que ser iguales a la hora de afrontar el acercarse a los demás.- Pero tampoco hay nada de malo en que no te guste hablar demasiado o prefieras tener tu espacio. Siempre que no te suponga un problema. -Porque claro, si eso impedía que pudiera seguir con sus estudios o trabajar, sí era problemático, pero si todo iba bien, no tenía por qué forzarse a hacer algo que no quisiera o no le gustase.
Sonrió un poco más cuando dijo que se iba a sentir culpable por no ofrecerle algo a cambio cuando ella iba a ayudarle a estudiar y le ofrecía galletas.- No te preocupes, no tienes que hacer nada por mí. -Dijo negando con la cabeza, hasta que él ofreció lo de llevarle los libros- Bueno, eso podría aceptarlo, me vendría bien un poco de ayuda para llevármelos de aquí. -Bromeó.- Por suerte la sala de estudio que utilizo está junto a la biblioteca, así que no te haré cargar demasiado cuando estudiemos juntos.
Le agradó que no negara, como algunos habían hecho, que el espíritu de Hogwarts era compartir sabiduría y crear vínculos de amistad entre todos los miembros de la comunidad mágica, independientemente de su origen o cualidades. Era uno de los objetivos principales del Colegio desde sus inicios, cuando Helga Hufflepuff velaba por la integración y la harmonía entre todos los alumnos a los que acogían.
Anotó mentalmente que Lex no tenía ninguna alergia, era un buen dato. Aunque se rió un poco cuando dijo lo del contacto con la gente.- Pues a mi no me parece que se te de tan mal. Quizá dependa del tipo de persona con la que hables o sea cuestión de entrenamiento, por así decirlo. -Aunque no creía que todas las personas tuvieran que ser iguales a la hora de afrontar el acercarse a los demás.- Pero tampoco hay nada de malo en que no te guste hablar demasiado o prefieras tener tu espacio. Siempre que no te suponga un problema. -Porque claro, si eso impedía que pudiera seguir con sus estudios o trabajar, sí era problemático, pero si todo iba bien, no tenía por qué forzarse a hacer algo que no quisiera o no le gustase.
Sonrió un poco más cuando dijo que se iba a sentir culpable por no ofrecerle algo a cambio cuando ella iba a ayudarle a estudiar y le ofrecía galletas.- No te preocupes, no tienes que hacer nada por mí. -Dijo negando con la cabeza, hasta que él ofreció lo de llevarle los libros- Bueno, eso podría aceptarlo, me vendría bien un poco de ayuda para llevármelos de aquí. -Bromeó.- Por suerte la sala de estudio que utilizo está junto a la biblioteca, así que no te haré cargar demasiado cuando estudiemos juntos.
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The sweet girl? CON Poppy EN Entrada al gran salón A LAS 14:00h, 04 de octubre |
¿Que no creía que se le diera mal? Bueno, era posible que Lex supiera poner buena cara o fingir... Podía llamarse de ese modo, si... Cuando tenía algún fin en concreto.
Claro que al principio solo le había dado cierta curiosidad la chica por el tema de su hermano y al final... había sido más fácil entablar una conversación con ella de lo que creía...
Debía reconocer que Marcus en eso si tenía razón.
Lo curioso era que, a diferencia de su hermano, ella no creía o al menos no se lo estaba diciendo, que no socializar demasiado fuera un problema. Bueno, en realidad había dicho que creía que el objetivo de Hogwarts era justo ese, pero al menos no le agobiaba con el tema de hablar y expresarse y todo eso... Y algo era algo, la compañía se hacía más sencilla si no te exigían compartir demasiado.
— ¿Sabes? Deberías hablar más con mi hermano sobre eso... — Le dijo con una suave sonrisa, y no porque pretendiera echarle un cable a su hermano, al contrario, ya podría aprender eso de "no es malo si no te supone un problema". Aunque bueno, el problema era más para Marcus.
— No te preocupes por eso, cargar se me da bien y... ¿Se puede considerar un entrenamiento? — Casi estaba bromeando, eso era extraño... Debía ser la Hufflepuff... Tal vez no había sido muy buena idea acercarse porque... Bueno, si empezaba con la dinámica de creer que era agradable y que estar con ella resultaba sencillo... Podría tener un gran problema. Especialmente con Marcus. Eso sonaba gracioso.
— Te los dejaré allí, y nos vemos el sábado.— Comentó poniéndose en pie para tomar los libros, tal como le había dicho.— Si alguna vez necesitaras dos brazos más pues...
Merci Prouvaire!
Timelady
Dornish Sun
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The sweet girl? CON Lex EN Gran Comedor A LAS 14:00H, 4 DE OCTUBRE |
Tenía la boca llena de patatas cuando Lex dijo que debería hablar con Marcus sobre aquello, ¿sobre qué parte? No creía que Marcus necesitara que le dijera que podía estar callado, porque... bueno, hablaba casi tanto como ella.
Se rió un poco cuando mencionó que podría ser parte de su entrenamiento el cargar libros para ella, suerte que ya había tragado.- Bueno, creo que mis libros pesan más que las pelotas de quidditch, ¿no? -Aunque no tenía ni idea, ni tampoco de cómo funcionaban los entrenamientos.
Terminaron de comer y se levantaron, Lex cogiendo la mayoría de los libros.- Te lo agradezco mucho, de verdad. -Sonrió en su dirección mientras caminaban.- Vamos a terminar alegrándonos de habernos chocado. -Bromeó al final. Ya que estaban, le enseñó la sala en la que daba las tutorías, así sabría dónde encontrar la el sábado.
Después se despidieron y Poppy decidió que tenía un nuevo amigo.
Se rió un poco cuando mencionó que podría ser parte de su entrenamiento el cargar libros para ella, suerte que ya había tragado.- Bueno, creo que mis libros pesan más que las pelotas de quidditch, ¿no? -Aunque no tenía ni idea, ni tampoco de cómo funcionaban los entrenamientos.
Terminaron de comer y se levantaron, Lex cogiendo la mayoría de los libros.- Te lo agradezco mucho, de verdad. -Sonrió en su dirección mientras caminaban.- Vamos a terminar alegrándonos de habernos chocado. -Bromeó al final. Ya que estaban, le enseñó la sala en la que daba las tutorías, así sabría dónde encontrar la el sábado.
Después se despidieron y Poppy decidió que tenía un nuevo amigo.
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