Jingle Bells

One on one — Inspired  — Pelicula

Cansado de los insultos y burlas de quienes creyó sus vecinos y amigos toda la vida a Jazz no le quedó de otra que volverse un muchacho desagradable, sin deseos de tener amigos, ni familiares ante la cruel respuesta de ellos a su elección de género masculino. Ninguno pudo entenderlo, era un pueblo alejado de las grandes urbes, muy lejos de que pensaran en él y los de la comunidad LGBTIQ como algo respetable. Muy lejos estaba él de cumplir con las expectativas de una sociedad que solo pensaba en esperar las Navidades y ser felices entre villancicos y familias heteronormadas.

Vive en una cabaña en las montañas y suele decirse que es completamente inhumano, que no tiene buenos sentimientos y que es una chica que se volvió loca. Suele recurrir al pueblo solo para buscar comida y volver lo más pronto posible con su perro Max a casa esperando no ser visto con su capucha negra. Pero esta Navidad ella ha llegado al pueblo para embellecer las calles mientras se acerca la nochebuena, y esta dispuesta a cambiar el cuento para todos allí. ¿Podrá una muchacha cambiar el destino de un chico recluido en su caparazón y un pueblo que ignora que esos corazones aún laten con fuerza?

Destiny Malena Narvay Maga

Jazz Maite Lanata Azalie

III. Tiempo de fiesta

Destiny jamás entendería como se sentía, ese pueblo lo había visto nacer y lo habían destruido luego, solo por ser diferente a los demás, todos parecían tan perfectos y felices. A Jazz eso le asustaba, no había compartido una fiesta con ellos antes y solo había bajado para robarse algo de comida que necesitaba.

Pero al parecer ella quería que siguieran disfrutando del espectáculo, este frunció el ceño, negando con la cabeza, si ella quería que saliera de allí iba a tener que moverlo porque estaba empecinado en no dejarse ver por nadie más. Y si lo descubrían?

- Qué pasa si me descubres? Tu me defenderás del fuego y las piedras? Ellos ya me han hecho daño, volverán a hacerlo, me odian y yo.. yo les odio también.. - murmuró, con los brazos cruzados, el castaño se sacó la máscara que llevaba, le molestaba bastante tener que ocultarse de esa manera.

III. Tiempo de fiesta

Se quedo mirándolo con el ceño fruncido cuando le dijo eso, porque no tenía ninguna duda que lo defendería de lo que necesitara, aunque no tenía conciencia real si podría hacerlo ante tanta gente. Los chicos eran idiotas, había podido defenderlo de ellos sin mucho más problema, pero en ese momento realmente eran muchas más personas y, si se detenía a pensarlo, podía salir muy mal realmente.

Aun así, asintió, porque si las cosas se complicaban encontraría la manera de resolverlas realmente. – Me encargaré que todo salga bien. Ahora vamos, sal de ahí. – Le dijo de nuevo para que supiera que todo estaba bien, extendiendo su mano para que la tomara de una buena vez.

Estaban todos demasiado borrachos y contentos para reparar en Jazz, realmente confiaba que las cosas fueran a salir bien si él simplemente se dejaba llevar por la gente y no se asustaba aunque, evidentemente, tenia sus buenas razones para hacerlo.

III. Tiempo de fiesta

Temía realmente que lo descubrieran y que aquello se descontrolaba, había pasado tanto tiempo solo en la montaña que salir al pueblo, a pesar de las buenas intenciones de Destiny era toda una hazaña, él no quería estar rodeado de gente así.

- Por favor, solo podemos festejar solos, en algún sitio? - le pidió haciendo un puchero en sus labios que lo hacían ver aún más niño de lo que era. - Confío en ti.. pero no.. no en ellos.. - no era demasiado lo que le pedía, necesitaba tiempo.

Un joven ebrio se acercó a la mesa y miró a la pareja, y luego otra vez como si hubiera descubierto algo muy divertido rompió a reir. - Pero mira quien está aquí! - dijo este sacándole el gorro a Jazz. Del susto Jazz dio un manotazo que hizo que el ponche saltara de la mesa y empapara a algunas señoras, él miró a Destiny con los ojos grandes del susto, muchos se acercaban a ver lo que pasaba y él necesitaba salir de allí antes de que le descubrieran.

III. Tiempo de fiesta

No podía creer tener tanta mala suerte como para que justamente se idiota por más borracho que estuviera fuera quien los descubriera allí. Inevitablemente frunció el ceño por toda la situación, tenía que pensar algo rápido para que nadie saliera herido, especialmente Jazz, ella intentaba que él tuviera nuevamente confianza en la sociedad, pero todos lo hacían terriblemente complicado y eso la fastidiaba de sobremanera.

Pensó rápido y lo tomo de la mano, tirando de él. – Lo siento, estamos todos un poco borrachos. – Balbuceo con esa sonrisa encantadora que le ponía a todo el mundo y que bien sabía que podía comprar a las señoras. Todas le tenían buena estima, al contrario de Jazz, había recibido aceptación del pueblo rápidamente y pensaba aprovecharlo. – Lo siento, permiso. – Repitió mientras tiraba de la mano de Jazz y se movía rápidamente entre la gente para que pudieran irse de allí.

Se movía rápidamente hacia su casa con él, aferrándose a su mano y metiéndose rápidamente ahí cuando pudieron, haciéndole un gesto para que se mantuviera en silencio porque seguramente su tía estaba durmiendo. – Aquí estaremos a salvo. – Murmuró por lo bajo.

III. Tiempo de fiesta

No podía creer en lo que terminó aquello, él solo había bajado al pueblo para robar algo de comer, pero ella lo había descubierto y ahora solo quería que disfrutara con ellos, es que no lo había entendido aún? Ese pueblo jamás lo aceptaría como era. Jasper casi se desmaya al ver a ese hombre borracho hablándole, ni hablar de las miradas de las señoras, solo se dejaba guiar por Destiny, que seguro tenía un lugar donde ir, pero ya todos le habían visto, temía por su vida y por que lastimaran a ella por su ayuda.

Finalmente habían llegado a una casa, Jazz respiraba con fuerza, intentando calmarse pero no podía hacer, parecía que le iba a dar algún tipo de ataque de ansiedad. - Te lo dije, yo te dije que era una mala idea! - exclamó, sin prestar atención a que alguien pudiera dormir allí o algo por el estilo, estaba asustado y peor aún, enojado con ella por ponerlos en peligro.

- Tengo que marcharme, este pueblo jamás va a aceptarme.. - masculló, buscando una salida por la parte trasera de aquella casa, desesperado por desaparecerse de allí en ese mismo momento. No iba a volver a confiar en Destiny.